
Por eso, la elección del color en gastronomía, y sobre todo en el sector foodservice, resulta fundamental para captar la atención del cliente y, además, transmitir sensaciones positivas. Los colores influyen en nuestro apetito y en nuestras emociones, ya que cada color representa un sentimiento diferente. Por lo tanto, la elección adecuada de colores resulta vital para ofrecer una buena experiencia gastronómica.

¿Qué efectos tienen los colores en la gastronomía?
Los diferentes colores en la gastronomía pueden ser utilizados para realzar el aspecto visual de un plato y mejorar la presentación y la apariencia de los alimentos. Además, los colores pueden afectar incluso nuestro apetito y percepción de los sabores. Aquí tienes algunos ejemplos:
- Rojo: El rojo suele asociarse con la pasión, lo picante y la energía. Es un color activo y vibrante que se utiliza en comidas como las salsas de tomate, las carnes asadas y los pimientos.
- Amarillo: El amarillo es a menudo relacionado con el sol y la felicidad. En la gastronomía, se encuentra en los platos de arroz frito, los huevos, las papas fritas o las tortillas.
- Naranja: El naranja puede evocar la alegría, la vitalidad y la salud. Se aplica en alimentos como las zanahorias, los melocotones, las calabazas y las mandarinas.
- Verde: El verde es un color que simboliza la naturaleza y la frescura. En la gastronomía, encontramos este color en ensaladas, espinacas, brócoli y diferentes hierbas.
- Azul: Aunque no es un color común en la gastronomía, el azul puede encontrarse en algunos alimentos, como los arándanos, las algas y las moras, entre otros. Los alimentos con este color suelen ser ricos en antioxidantes y, por tanto, saludables.
- Morado: El morado se relaciona con la creatividad y la elegancia. La berenjena, la remolacha, las uvas y algunos tipos de col rizada, son algunos alimentos en los que podemos encontrar este color.
¡Recuerda! Esta guía de colores es aproximada y puede variar dependiendo de la cultura y del contexto gastronómico.

El poder del color en las ensaladas: verde que te quiero verde… ¡y rojo y amarillo!
Los colores juegan un rol esencial en las ensaladas. En estas podemos encontrar diferentes tipos de colores en los ingredientes que pueden combinarse para ofrecer un plato equilibrado. Por ejemplo, el rojo de los tomates, el verde de la lechuga, el amarillo del maíz y el naranja de las zanahorias. Además, el uso de flores comestibles o germinados puede aportar un toque de color extra. Y como no, las salsas o aderezos, fundamentales en las ensaladas y que terminaran de dar un toque de textura y color a este plato, ligero y refrescante, estrella del verano e ideal también para todo el año.
Aquí tienes diferentes ejemplos de ensaladas muy coloridas:
-Ensalada de escarola y naranja: el verde claro de la escarola contrasta con el rojo de las fresas o la grosella, el naranja de los cítricos y el color de la Salsa Miel Mostaza Risso®.
-Ensalada de pasta y pollo con Salsa César Risso®: el amarillo/naranja de la pasta contrasta con el verde de los canónigos y el morado de la cebolla.
-Ensalada de garbanzos y atún: combina el amarillo de los garbanzos con el rojo de los tomates cherry y el color carne del atún. Unos colores potenciados por la Vinagreta Balsámica Risso® combinados con el naranja de la Salsa Andalouse Risso®.
-Ensalada de berenjena y mozzarella con Vinagreta de Mostaza Risso®: donde el rojo de los frutos rojos contrasta con el verde de los berros y morado de las pieles de la berenjena.
-Ensalada de higos gratinados con queso azul: en la que predomina el verde y el morado de las lechugas y los higos con el naranja de la zanahoria y el blanco y azul del queso azul. Unos colores potenciados por la Vinagreta Balsámica Risso®

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Uso del color en las sopas y cremas: ¡colores hasta en la sopa!
En las sopas, los colores pueden ser utilizados para destacar la textura y el sabor de los ingredientes y pueden influir en la percepción del sabor y la presentación visual del plato. Por ejemplo, en una sopa de calabaza, el color naranja resalta la textura cremosa y suave del producto principal.
El color puede ser un indicio del contenido nutricional y de la calidad de los ingredientes utilizados. Una sopa con un tono rojizo, por ejemplo, puede indicar la presencia de tomates o pimiento rojo, mientras que un tono verde puede ser una señal de la utilización de espinacas o hierbas frescas. Los chefs y los profesionales de la cocina a menudo utilizan ingredientes con diferentes colores para crear sopas multicolores que atraen la atención y estimulan el apetito.
Además, algunos restaurantes y cocineros han incorporado la técnica de la cromoterapia en la elaboración de alimentos, donde se utilizan colores específicos para crear un estado de ánimo particular en el comensal y mejorar su experiencia gastronómica.
Y para colores, los de estas deliciosas y reconfortantes sopas:
-Crema fría de puerro: en la que el color beis contrasta con el amarillo del aceite y los colores vivos de las flores comestibles utilizadas como decoración.
-Salmorejo con mango emulsionado con mayonesa: que combina el color salmón del salmorejo, fruto de la mezcla de tomate emulsionado con la Mayonesa Superior Risso®, con el naranja del mango.
-Curry de verduras: una auténtica explosión de texturas y de colores en la que el curry de verduras de color salmón contrasta con los pimientos cortados en juliana.
-Crema de espinacas con espirulina: con un color verde intenso y muy característico, resultado de la mezcla de las espinacas con el alga espirulina.

La importancia del color en los platos principales: ¡dime con quién andas y te diré de qué color eres!
En los acompañamientos de los segundos platos o platos principales, los colores pueden utilizarse para destacar la carne o el pescado que estamos sirviendo. Además, podemos jugar con el color de las salsas o las guarniciones para aportar contraste o equilibrar el sabor. Aquí tienes otros buenos ejemplos de cómo el color puede mejorar la presentación de un plato:
-Carpaccio de ternera con crema de membrillo y Vinagreta Balsámica Risso®: un plato muy sencillo de preparar y muy vistoso que combina el verde de la rúcula como base con el rojo de la carne y el beis del queso parmesano.
-Crepes de pato con Salsa de Soja Tailandesa y Salsa Barbacoa Risso®: un juego de sabores, texturas y colores donde el color granate oscuro de la base contrasta con el magret de pato y las verduras.
-Bacalao con hummus de guisantes: donde el blanco del pescado contrasta con el verde de los berros y el hummus de guisantes.
-Rape frito con crema negra de cebolla: una combinación en la que el color beis del rape contrasta con la crema negra de cebolla. Una elegante combinación decorada con unos puntos de Mayonesa Superior Risso® para lograr un mayo

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Postres y colores en gastronomía: ¡un match que siempre triunfa!
En cuanto a los postres, el color es fundamental para transmitir sensaciones de frescura y dulzura. Los postres a menudo tienen colores vibrantes y llamativos que los hacen atractivos a la vista y dan la impresión de ser una delicia dulce y suntuosa. Además, los colores pueden indicar el sabor y la textura del postre, como los tonos marrones de una mousse de chocolate densa y cremosa o los tonos rojos de un milhojas con frutos rojos. ¡Recuerda que el postre es la parte más rentable de una carta o menú en la hostelería y que por eso es vital que llame la atención de los clientes!
Aquí te dejamos con una selección de postres deliciosamente coloridos:
-Cremoso de naranja y mango: que combina el blanco de la nata vegetal azucarada y montada Chanty Premium Spray Risso® con el color naranja del cítrico.
-Torrija de cheesecake: en el que la torrija contrasta con el rojo de las grosellas.
-Coulis de frutos rojos con crujientes de frambuesa y Chanty®: la combinación de blanco y rojo que nunca falla.
-Milhojas de frutos rojos con Chanty Premium Spray Risso®: una delicada combinación de crema pastelera, con nata y frutos rojos.
Otra tendencia popular en la presentación de postres es el uso del color pastel. Los tonos pastel suaves y delicados se han vuelto muy populares en la gastronomía y el foodservice, reflejando la creciente tendencia hacia la comida saludable y consciente. Aquí tienes unos ejemplos de postres con tonos pasteles: mousse de café y Baileys, flan de amaretto, mousse de marrón glasé y mousse de tres chocolates.

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En definitiva, el uso del color en la gastronomía y el foodservice es vital para transmitir sensaciones positivas y satisfacer las expectativas de los clientes. La elección del color adecuado en cada plato es fundamental para conseguir una experiencia gastronómica completa e inolvidable.
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